Hace un tiempo hice un gran descubrimiento en la web que inmediatamente añadí a mis favoritos. Sólo esperaba tener una buena excusa para comprar en la juguetería online demartina.com, una de esas con juguetes que molan -de verdad-.
Desde el primer momento sentí que entraba en una auténtica juguetería, paseándome por sus estanterías repletas de juguetes cuidadosamente seleccionados, fotografiados, clasificados y descritos. Hay tantas formas de encontrar fácilmente los juguetes que buscas o de descubrir otros nuevos, que puedes pasar horas sentado cómodamente en el sofá explorando y enamorándote de su catálogo, del que tarde o temprano picarás.
La experiencia de compra no podría haber sido mejor: usabilidad sin trabas, proceso de compra con registro sin enredos y entrega puntual. La caja incluyó cupón descuento para próximas compras y la guinda vino en forma de sobres de cromos inesperados. ¿Cómo sabían a que a mi peque de 4 le encantan los cromos de fútbol?. Así se nota que saben lo que hacen, que llevan tiempo haciéndolo, que les gusta hacerlo bien y por supuesto, que quieren que vuelvas.
Compro mucho casi todo por Internet. Escribo esta reseña porque muchas de las tiendas online que hoy en día emergen como setas necesitan modelos a seguir. No solo se trata de crear tiendas on-line bonitas y que vendan solas, hay que mimar el escaparate, organizar bien las estanterías, conseguir que el visitante se sienta arropado en una tienda digital como en una de verdad…
No creo que a demartina.com les importe que les haya copiado aquí uno de sus banners para regalarles un enlace en agradecimiento a los cromos.