Hace ya algo más de 10 años me tocó pasar unos días en Amsterdam, por trabajo, pero siempre queda algo de tiempo para visitar sitios y hacer fotos. Todas las de este post corresponden a negativos escaneados de aquel viaje.
La ciudad es de las que vale la pena visitar y donde se puede aprender mucho. La orografía de allí, un país prácticamente plano, facilita mucho el uso de la bicicleta -las fotos son del mes de febrero y se pueden ver las calles llenas de ellas- de las que dicen hay unas 500.000 en la ciudad y calculan que al año unas 40.000 cambian de mano debido a los robos.
La gastronomía es muy diferente a la nuestra, con platos bastante fuertes y con salsas espesas, se bebe más cerveza que vino y existen esos locales especiales –los coffee shops– donde, si quieres, te pueden liar un porro, pero no te pueden servir bebidas alcoholicas.
Del barrio rojo hablaré en otro post.
Por las fotos que vemos la ciudad tiene que ser preciosa,desde luego las fotos son bien bonitas,enhorabuena.
Amsterdam es uno de los destinos que me gustaría visitar.
La verdad es que tienen encanto las fotos viejas escaneadas. Es como una solera especial que las hace mas interesantes que las impolutas fotos digitales. Eulogio, me jas picado, voy a hurgar en mis cajas de zapatos llenas de fotos a ver que encuentro.
Todas estas son de negativos escaneados. En concreto las de Holanda no están tan mal, pero con otras me he llevado alguna sorpresa desagradable. Los negativos, pasados unos cuantos años, si no están muy bien almacenados se deterioran bastante.
En algunos casos es incluso mejor escanear directamente la copia en papel.