Es cierto, como ha dicho Mario que el postproceso es sólo la novena fase de una foto, pero no deja de ser una fase importante de la que a veces parece que la gente se avergüenza, como si fuese una forma de arreglar lo que no has sabido solucionar al hacer la foto. Realmente es la última fase y en ella intentas conseguir que el resultado sea lo más parecido posible a lo que imaginaste al disparar la cámara.
Las cámaras -sea cual sea su tecnología- no tienen el mismo rango dinámico que el ojo humano, por poner un ejemplo. Así, es imposible que una foto sin procesar plasme fielmente la escena que se está fotografiando en todos los casos. Eso se soluciona con el postproceso, al igual que antes se solucionaba en el laboratorio de revelado.
Cuando se trabajaba con película y se dependía de un laboratorio siempre tenías algún chasco con las fotos. El carrete tenía fotos de todo tipo, con distintos tipos de iluminación, ambiente, composición… pero quien procesaba elegía unos parámetros medios para todo el lote. Resultado: algunas fotos distaban mucho de ser lo que uno esperaba. La fotografía digital ha permitido recuperar esa parcela, y sería de tontos no aprovecharla.
La foto del ejemplo -Ampliación de la terminal de trasatlánticos del Puerto de Vigo- fue tomada cuando ya había poca luz, con una apertura lenta (1/10 segundos) para poder mantener un ISO bajo (100). Pero después fue preciso hacer retoques en el postproceso:
- Reencuadre y nivelado: es dificil manener la horizontalidad perfecta y cuando hay agua (sobre todo si tenermos el horizonte) las pequeñas inclinaciones se notan mucho.
- Ajuste de niveles: exposición, luces altas, blancos, sombras, negros, saturación, presencia, intensidad…
- Ajuste del enfoque: es un ajuste fino. A mi me gusta tocarlo casi siempre un poco.
- Ajuste de las saturaciones de los canales rojo, azul y naranja. Gracias a ello se puede ver el cielo, las nubes y la grúa como pretendía.
El postproceso no sirve para «arreglar» un desenfoque o una mala composición, pero es un gran conjunto de herramientas que tenemos ahí para conseguir lo que buscamos en una foto, que no por hacer uso de ello pasa a tener menos valor.
Este sería el aspecto de la foto sin postproceso. Que, para ser precisos, no sería exactamente sin postproceso, lo que sería es la foto con los ajustes de postproceso por defecto -en este caso del Photoshop Lightroom, en otros casos de la cámara- para transformar el formato raw a jpg. ¿Cual está mejor?
- Cámara Canon EOS 7D
- Fecha 2014:09:07 21:09:59
- Programa M
- Focal 18mm
- Apertura f/4.5
- Exposición 1/10 · 0.100s
- ISO 100
- Exposición Manual
- Balance de blancos Automático
- Medición Matricial
- Espacio de color no calibrado
- Software de revelado Adobe Photoshop Lightroom 5.6 (Windows)
- Dimensiones 1024*683 pixels
- Peso 0.49MB
- © David Fernandez Vergara
Yo me he encontrado más gente que presume de postprocesar a pecar de haber tomado una mala imagen, que los que prefieren postprocear lo mínimo o incluso repetir una fotografía para no hacerlo.
Es cierto que la tecnología está ahí para aprovecharse de ella -tú me lo enseñaste, allá por el 92- y eso requiere aprender una metodología adicional a la de tomar la foto.
Vas como una moto con tanto post, tendré ponerme las pilas para cogerte el ritmo.
Supongo que lo lógico y razonable es intentar tomar la foto lo mejor posible y después postprocesar hasta obtener el resultado que buscas.
Dependiendo de la lente que estés utilizando, las condiciones de luz, el rango dinámico, etc., puedes necesitar retocar más o menos cosas. Yo entiendo el postproceso como el revelado, que no es el mismo para cualquier foto, depende de las condiciones particulares.
Lo que me resulta molesto es cuando al charlar te encuentras con alguien que viene a decir que procesar es un demérito para la foto.
Llevaba tiempo sin publicar nada, así que por falta de material ahora no será 🙂