Ponte en situación: observas el entorno, la luz y las sombras. Ajustas los controles de tu cámara de acuerdo a la escena. Te situas en el lugar adecuado. Asomas un ojo al visor concentrando la atención en tus protagonistas. Encuadras y posas el dedo suavemente en el disparador para fijar el blanco de enfoque. Contienes el aliento y en el momento adecuado… ¡disparas!.
¿Has visto? No es tu avanzada cámara. No es casualidad. El instante decisivo*, ¡lo decides tú!. La fórmula anterior es garantía de éxito y si persigues tu foto con tenacidad, la conseguirás.
* Henri Cartier-Bresson confundador de la agencia Magnum Photos popularizó el concepto del instante decisivo en fotografía.
Carreras de trineos
Este fin de semana disfrutamos de un espléndido, frío y nevado día en las montañas de Cabeza de Manzaneda, en Ourense.
Nuestra amiga Paula a menudo me recuerda que nunca salgo en las fotos. Así que preconfiguré la cámara en modo ráfaga, autofoco servo y la dejé en sus manos. Ella aguardó pacientemente a que los trineos cogiesen velocidad y cuando ya estábamos cerca, disparó capturando el momento más emocionante.
Es mi foto favorita de este fin de semana y no la he capturado yo. Gracias a Paula DR por inmortalizar aquella épica carrera de trineos.
- Cámara Canon PowerShot G15
- Fecha 2015:02:08 15:12:28
- Focal 6.1mm
- Apertura f/4.0
- Exposición 1/2000 · 0.001s
- ISO 80
- Exposición Automática
- Balance de blancos Automático
- Medición Matricial
- Espacio de color sRGB
- Software de revelado Aperture 3.6
- Dimensiones 1024*768 pixels
- Peso 0.25MB
Muy buena Paula!!!!
La foto tiene mérito, sí… pero los protagonistas también nos jugamos el tipo bajando la ladera nevada en trineo a tumba abierta y sobrevivimos varias veces.
Fue un día de coche muy largo, pero ir la la nieve un día de sol es muy divertido.
¡Muy buena la foto y la aventura! La nieve siempre divierte y fascina a niños y mayores. Al final… ¿qué trineo ganó? los del segundo trineo van dándolo todo jajaj. Bonito momento para el álbum de recuerdos.
Este es un ejemplo real de lo que clásicamente se suele decir como «ir cuesta abajo y sin frenos». En esa carrera en concreto ganaron ellos, pero reír nos reímos todos infinito.